Cuidados post-quemadura: cómo cuidar una herida de quemadura para una buena recuperación
Las quemaduras pueden variar en gravedad, desde lesiones leves hasta casos más serios que requieren atención médica especializada. Sea cual sea el tipo de quemadura, es necesario que sepas cómo cuidarla para evitar infecciones, reducir el dolor y ayudar con la cicatrización.
A continuación, te ofrecemos una guía completa sobre cómo cuidar una herida de quemadura para facilitar tu recuperación.
¿Qué hacer cuando te quemes?
Actuar rápidamente ante una quemadura es clave para minimizar el daño y aliviar el dolor. Si sufres una quemadura, sigue estos pasos básicos de inmediato:
- Enfría la zona afectada: coloca la zona quemada bajo agua fría corriente durante al menos 15 a 20 minutos. No utilices hielo ni agua demasiado fría, ya que puede dañar aún más los tejidos.
- Retira objetos de la piel: si la quemadura afecta zonas con ropa, joyas o accesorios, retíralos lo antes posible, siempre y cuando no estén pegados a la piel.
- Protege la quemadura: después de enfriar la piel, cúbrela con una gasa o paño limpio para evitar el contacto con el aire, lo que puede agravar el dolor.
- Evita remedios caseros: no apliques mantequilla, aceites o pasta de dientes sobre la quemadura, ya que podrían empeorarla o causar infecciones.
Aquí tienes más detalle sobre primeros auxilios para quemaduras menores. Si la quemadura es extensa o de segundo/tercer grado, es fundamental buscar atención médica lo antes posible.
Cuidados post-quemadura: cómo cuidar la herida
Después de la atención inicial, la curación de una quemadura requiere seguir una serie de cuidados para asegurar una recuperación óptima:
- Limpieza diaria
Lava la herida suavemente con agua y jabón neutro una vez al día para eliminar bacterias y restos de tejido muerto. Es importante no frotar ni aplicar productos que puedan irritar la
piel. Asegúrate de que la zona esté completamente seca antes de aplicar cualquier tratamiento.
- Aplica pomada o apósitos
Después de la limpieza, aplica una pomada adecuada para quemaduras, como Linitul* con acción cicatrizante. También lo encontrarás en formato apósito, que contiene los mismos ingredientes que la pomada y es igual de efectivo.
- Uso de vendajes protectores
ubre la zona con un vendaje para que el apósito impregnado o la pomada quede en la zona afectada y pueda hacer su función. También es necesario para proteger la herida de posibles roces o agentes externos.
- Renovar con frecuencia
Cambia el vendaje diariamente (aplicando nuevamente pomada 2 veces al día o los apósitos cicatrizantes cada 12 o 24 horas). Los deben mantenerse hasta que la piel sane por completo.
- Alivio del dolor
Si sientes dolor, puedes tomar analgésicos como o (ambos son medicamentos de venta en farmacia sin receta), bajo la indicación de un profesional. También puedes utilizar compresas frías (no congeladas) para aliviar las molestias.
- Prevención de infecciones
Observa la evolución de la herida. Si notas signos de infección, como enrojecimiento, calor, hinchazón o secreciones, acude al médico de inmediato.
- Evita el sol
La piel quemada es muy sensible a la exposición solar. Utiliza ropa para cubrir la zona o aplica protector solar de amplio espectro con un SPF 50 o superior una vez que la herida haya cicatrizado.
¿Cuánto tiempo hay que usar pomadas o apósitos después de la quemadura?
El tiempo necesario para usar pomadas y apósitos dependerá del tipo y gravedad de la quemadura. A continuación, te damos una guía general:
- Quemaduras leves (primer grado): en este caso, es probable que solo necesites usar pomadas y apósitos entre 3 y 5 días, hasta que la piel comience a regenerarse y ya no tengas molestias.
- Quemaduras moderadas (segundo grado): para quemaduras que desarrollan ampollas, deberás aplicar la pomada y cambiar los apósitos entre 1 y 2 semanas, dependiendo de la evolución. La piel tardará un poco más en regenerarse, pero si sigues los cuidados indicados, evitarás infecciones y minimizarás las cicatrices.
- Quemaduras graves (tercer grado): estas requieren de seguimiento médico. La duración del uso de pomadas y apósitos puede extenderse a varias semanas o incluso meses. Es fundamental que sigas estrictamente las indicaciones recibas, ya que el tratamiento puede incluir injertos de piel u otras intervenciones avanzadas.
Recuerda que la duración del tratamiento puede variar dependiendo de cómo responda tu piel.
Cuidados post-quemadura durante la cicatrización
Durante el proceso de cicatrización, es normal que la zona afectada se vuelva sensible y pueda causar picazón. Aquí te dejamos algunos consejos para cuidar la piel durante esta etapa crítica:
- Evita rascarte: aunque es común sentir picazón, rascarte puede dañar la epidermis y aumentar el riesgo de infección. Para aliviar este síntoma, aplica cremas hidratantes o calmantes recomendadas por tu médico.
- Mantén la piel hidratada: usa productos específicos para quemaduras o cremas hidratantes suaves para evitar la sequedad y la tirantez en la piel que está cicatrizando. Esto no solo te ayudará a sentirte más cómodo, sino que también favorecerá una cicatrización más rápida y saludable.
- Masajes suaves: una vez que la piel ha cerrado, puedes realizar masajes suaves con cremas cicatrizantes. Esto ayudará a mejorar la elasticidad de la piel y puede reducir la aparición de cicatrices visibles.
- Protégete del sol: la piel nueva es especialmente vulnerable a los rayos UV, lo que puede provocar manchas permanentes. Asegúrate de cubrir la zona afectada y aplicar protector solar de amplio espectro (SPF 50 o superior) si la cicatrización ya ha avanzado y la piel está expuesta al sol.
Tanto los apósitos como la pomada de Linitul* contienen de Perú y aceite de ricino con las siguientes propiedades:
- El bálsamo de Perú con acción antiséptica y que favorece la microcirculación sanguínea cutánea.
- El aceite de ricino reconocido por sus propiedades cicatrizantes y acción emoliente.
Estos ingredientes trabajan en sinergia para ayudar a la cicatrización.
Cuidar correctamente una quemadura no solo acelera el proceso de recuperación de la piel, sino que también previene infecciones y complicaciones. Sigue estas pautas y, ante cualquier duda o signo de alarma, consulta con un profesional de la salud.
*Linitul es un medicamento sin receta de venta en farmacias.