¿La cera de abejas sirve como cicatrizante para la piel?

Cada vez más personas buscan opciones naturales para cuidar la piel y ayudar a que las heridas cicatricen mejor. Entre los ingredientes más populares está la cera de abejas, conocida por su capacidad para hidratar, proteger y suavizar.
Se encuentra en muchas cremas y bálsamos, pero… ¿realmente ayuda a cicatrizar la piel? En este artículo, te contamos lo que dice la ciencia, sus beneficios reales, en qué casos puede usarse y qué precauciones debes tener en cuenta antes de aplicarla sobre una herida. ¡Sigue leyendo!¿Qué papel puede tener la cera de abejas en el cuidado de la piel lesionada?
La cera de abejas ha sido usada durante mucho tiempo como uno de los ingredientes principales de algunos productos elaborados con la finalidad de tratar cortes, quemaduras leves y piel irritada. ¿La razón? Protege, suaviza e hidrata, creando una barrera que ayuda a mantener la zona en buenas condiciones. Pero, ¿cómo actúa realmente en las heridas y qué papel juega en la reparación de la piel? Te lo contamos.
¿Qué componentes activos lleva la cera de abejas?
Entre los componentes principales de la cera de abejas destacan:
- Ésteres de ácidos grasos y alcoholes que ayudan a suavizar y proteger la piel. Actúan como un escudo hidratante: crean una capa que evita que la piel pierda humedad, lo que la mantiene elástica y con buen aspecto. Aunque todavía se necesita más investigación específica en piel con heridas, varios estudios apuntan a que su efecto emoliente puede ser útil para cuidar zonas sensibles o secas[1].
- Hidrocarburos saturados: uno de los ingredientes clave en la cera de abejas son los hidrocarburos saturados, que actúan como una película protectora sobre la piel. Esta capa evita que la zona se seque demasiado y también protege frente a irritantes del entorno (como el viento, el polvo o productos agresivos)[1].
- Vitaminas y antioxidantes naturales: estos ayudan a cuidar la piel dañada y a repararla más fácilmente, sobre todo porque combaten el estrés oxidativo, que puede empeorar las heridas o hacer que la piel envejezca antes de tiempo. Aunque todavía se están estudiando a fondo sus efectos exactos, ya hay investigaciones que apoyan su papel en la salud y regeneración cutánea, especialmente en piel sensible o con tendencia a irritarse[1].
¿Cómo actúa la cera de abejas sobre una herida?
Solo bajo indicación profesional, la cera de abejas puede utilizarse en contextos sanitarios para formar una capa protectora con posibles beneficios:
- Retiene la humedad, lo que ayuda a que la piel forme tejido nuevo más fácilmente.
- Aísla la herida del entorno, reduciendo el riesgo de que entren bacterias o irritantes.
- Crea un entorno estable que puede favorecer la regeneración cutánea[2].
Ahora bien no es un ingrediente que acelere directamente la cicatrización. Su efecto es más de acompañamiento.
Para una reparación más completa, existen medicamentos cicatrizantes como los apósitos impregnados y la pomada cicatrizante de Linitul* con ingredientes activos como el bálsamo de Perú, con acción antiséptica y favorecedor de la microcirculación sanguínea, y el aceite de ricino, con acción cicatrizante y emoliente.Beneficios de la cera de abejas para la piel
Aunque no tiene acción cicatrizante directa, la cera de abejas se utiliza con frecuencia en bálsamos, ungüentos y cremas corporales por su capacidad para formar una capa protectora sobre la piel. Esta función ayuda a preservar la hidratación y proteger la barrera cutánea, especialmente en piel seca o sensible.
A continuación, te contamos cómo puede integrarse en el cuidado diario de la piel.
Hidratación y protección de la barrera cutánea
Una de las cualidades más valoradas de la cera de abejas es su capacidad para ayudar a que la piel no pierda su hidratación natural. Cuando se aplica en forma de crema o ungüento, siempre bajo recomendación médica, forma una especie de escudo invisible que protege sin tapar los poros. Este efecto se conoce como barrera oclusiva[2], y tiene varios beneficios clave:
- Evita que la piel pierda agua, algo esencial si está dañada o muy seca.
- La mantiene flexible, suave y elástica, lo que mejora su aspecto y comodidad.
- Refuerza su función de barrera natural, sobre todo si está expuesta al frío, al roce o a climas muy secos[2].
Aplicaciones de la cera de abejas en el cuidado de heridas
La cera de abejas no es un cicatrizante potente por sí sola, pero aplicada en forma de crema o bálsamo puede ser un buen complemento en el cuidado de la piel dañada, sobre todo en fases tempranas o cuando la herida ya está cerrada. Resolvemos algunas dudas frecuentes sobre el uso de productos que contienen cera de abejas en el contexto del cuidado cutáneo.
¿Sirve la cera de abejas para quemaduras o rozaduras leves?
La cera de abejas se ha usado desde hace mucho tiempo para la elaboración de productos con la finalidad de calmar la piel irritada o dañada. Aunque tiene efectos cicatrizantes limitados, puede formar parte de fórmulas que buscan aislar la piel del exterior y conservar su hidratación, sobre todo cuando se combina con ingredientes con acción específica. Esto es lo que puede aportar dentro de un producto cosmético:
- Actúa como una barrera física, lo que puede ayudar a que la zona no se reseque ni se irrite más [4].
- Ayuda a mantener la hidratación de la piel, creando un entorno más estable [5].
Algunos estudios han observado que la combinación de cera de abejas con miel u otros ingredientes antibacterianos mejora la curación de quemaduras, ya que crean un entorno adecuado para que el tejido nuevo crezca mejor y con menos riesgo de infección[6].
Por eso, la cera de abejas es útil como parte de fórmulas que cuidan la piel dañada, pero no sustituye a un tratamiento médico especialmente cuando la herida es profunda, está infectada o necesita atención especial.
¿Puede usarse en heridas crónicas o úlceras?
Para heridas crónicas o úlceras, siempre se debe seguir el tratamiento indicado por un médico. En algunos casos, los profesionales pueden recomendar fórmulas que incluyen cera de abejas como parte de una base protectora o emoliente, dentro de un tratamiento más amplio.
En combinación con ingredientes como la miel, se ha estudiado su utilidad para mantener la piel hidratada y protegida, favoreciendo un entorno estable. Su acción principal es formar una barrera oclusiva que ayuda a evitar la pérdida de humedad y a proteger frente a agentes externos [7].
Aunque la investigación sigue en curso, algunos estudios señalan que estas fórmulas podrían ser útiles para mantener la integridad cutánea en piel dañada [4].
Eso sí, la cera de abejas no debe considerarse un agente terapéutico por sí sola, ni usarse sin indicación médica en heridas complejas o abiertas.
Cera de abejas en la piel: consejos y consideraciones
Aunque la cera de abejas suele ser bien tolerada por la mayoría de las personas, no está libre de riesgos. Como con cualquier ingrediente natural, puede causar reacciones si no se usa bien o en personas sensibles. Saber cuándo evitarla o consultar con un profesional es clave para un uso seguro y eficaz. Te contamos algunos de los casos más comunes.
¿Puede causar alergia la cera de abejas?
Sí, aunque no es lo más común, la cera de abejas puede causar reacciones alérgicas en algunas personas, sobre todo si ya han tenido problemas con otros productos derivados de las abejas como el propóleos o la miel.
Se han descrito casos de dermatitis de contacto por el uso de bálsamos o ungüentos con cera de abejas en personas sensibles[8]. También se ha observado que la exposición repetida, como en apicultores y sus familias, puede aumentar el riesgo de sensibilización[9].
Por eso, si tienes piel muy sensible o antecedentes de alergia a productos apícolas, lo mejor es consultar antes con un dermatólogo[10]. Aunque la cera de abejas tiene muchos atractivos, no es para todo el mundo.
¿En qué casos no se recomienda usar cera de abejas?
Aunque la cera de abejas puede ser muy útil para cuidar la piel, hay algunas situaciones donde no se aconseja usarla. Aquí te contamos cuáles son y por qué:
- Si tienes la piel grasa o con tendencia acneica: la cera de abejas forma una capa oclusiva sobre la piel, lo que puede obstruir los poros y empeorar el acné. En pieles con exceso de sebo, podría favorecer la aparición de granitos y brotes[11].
- Si eres alérgico a productos de las abejas: si tienes alergia al polen, la miel o el propóleos, mejor no usar cera de abejas. Aunque no suele causar reacción directa, puede contener trazas de alérgenos que desencadenen síntomas. Se ha documentado que puede provocar dermatitis de contacto, especialmente en personas con sensibilidad previa a otros productos de las abejas [12].
- Si tienes dermatitis o eccema activo: Si tienes brotes de eccema o dermatitis, la cera de abejas podría irritar más la piel o causar reacción alérgica[12].
La cera de abejas puede ser un buen complemento en el cuidado de la piel gracias a su capacidad para proteger, hidratar y mantener un entorno estable, pero no sustituye tratamientos médicos ni tiene una acción cicatrizante potente por sí sola.
Preguntas frecuentes sobre la cera de abejas como cicatrizante
¿Es la cera de abejas más efectiva que los cicatrizantes convencionales?
No. Aunque la cera de abejas es útil para hidratar y proteger la piel, si lo que buscas es favorecer el proceso de cicatrización te recomendamos usar medicamentos específicos como los de Linitul*.
*Linitul es un medicamento de venta libre en farmacias.*
Referencias
[1] Arcos, C. A., Wagner, R. M., et al. (2019). Cicatrización normal y patológica: una revisión actual de la fisiopatología y el manejo terapéutico. Revista Argentina De Cirugía Plástica, Estética Y Reparadora, 25(01), 0011-0015. https://doi.org/10.32825/racp/201901/0011-0015
[2] Gil-Castaño, G. and Cardona, R. (2020). Emolientes: beneficios, elementos clave y aplicación clínica. Revista Alergia México, 67(2), 128-141. https://doi.org/10.29262/ram.v67i2.730
[3]Astudillo, M. D. S. S., et al. (2024). Cicatrización de heridas y el uso de la panela como agente coadyuvante wound healing and the use of panela as an adjuvant age. Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar, 8(5), 9448-9460. https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v8i5.14328
[4] Delgado, L., Méndez, M., & Guzmán, N. (2021). Tratamientos no convencionales utilizados en la curación de las heridas. Paradigmas Socio-Humanísticos, 2(2), 45-61. https://doi.org/10.26752/revistaparadigmassh.v2i2.520
[5] Morales, I., Mast, A., & Mejías, M. (2022). Tratamiento de heridas crónicas con miel de abejas. Revista Gicos, 7(2), 102-107. https://doi.org/10.53766/gicos/2022.07.02.08
[6] Schencke, C., Vásquez, B., Sandoval, C., & Sol, M. (2016). El rol de la miel en los procesos morfofisiológicos de reparación de heridas. International Journal of Morphology, 34(1), 385-395. https://doi.org/10.4067/s0717-95022016000100056
[7] Rodríguez-Gil, N., Delgado, L., & Campos-Guzman, N. (2017). Tratamientos innovadores utilizados en el manejo de las heridas crónicas. Revista Ciencia Y Cuidado, 14(2), 80. https://doi.org/10.22463/17949831.1112
[8] Jacob, S. E., et al. (2008). Allergic contact dermatitis to propolis in a child. Dermatitis, 19(1), 44-46.
[9] Basista, M. H., et al. (2012). Bee products and allergy: Bee-aware. Annals of Allergy, Asthma & Immunology, 109(2), A47.
[10]Freedman, R. A., et al. (2018). Allergic contact dermatitis to beeswax in lip balm. Dermatitis, 29(4), 216–217.
[11] González, M., Villarreal, L., Baez, C., & Moreno, K. (2023). Acné vulgar, innovaciones en su tratamiento. Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar, 7(5), 9806-9816. https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v7i5.8542
[12] Nyman, G., Tang, M.,et al. (2019). Contact allergy to beeswax and propolis among patients with cheilitis or facial dermatitis. Contact Dermatitis, 81(2), 110-116. https://doi.org/10.1111/cod.13306